viernes, 14 de octubre de 2011

Un desastre.

- [...] Me habéis malinterpretado. Hace mucho...me dijiste algo así como que dejo que la gente dependa demasiado de mí. Pues tenías razón, ¡es totalmente cierto! Yo...no puedo vivir si no tengo a alguien dependiendo de mí, sólo cuando tengo una persona dependiente me siento satisfecho. Soy un desastre ¿por qué será? Tal vez porque me crié así, o puede que sea mi naturaleza. La cuestión es que no soy la persona sacrificada que pensáis; detrás de todas mis buenas acciones lo único que hay es autocomplacencia. No importa si es Yamamoto o no, me viene bien cualquiera.

- Pero entonces, también podría ser Nanami... 

- No seas tonta, ella no necesita depender de nadie ¿no crees?

- Ja...jaja. Tienes una buena excusa, pero en realidad lo único que estás haciendo es huir. Simplemente te da miedo Nanami. Claro, es eso...tienes miedo de que se repita la historia ¿no? Pasarías otra vez por lo mismo. No quieres que te vuelva a dejar.

- ¿Que "me vuelva a dejar"? ¿Qué dices?

- Tu madre, Nanami, ambas te... 

- ¿Me abandonaron dices? 

 - Crees que te traicionaron, que se marcharon sin importarles que te quedaras solo, a pesar de que las amabas. A pesar de que siempre fuiste honesto, fiel y te dedicaste por completo a ellas, rompieron su promesa. Dices que te gusta que otros dependan de ti ¿eso no será porque tú también quieres entregarte a los demás y que te comprendan? Pero tú ahora no te entregas a nadie, porque si lo haces...posiblemente te traicionen. Piensas que te han traicionado porque tenías esperanzas en ellas, y es extraño porque en realidad querías cumplir los sueños de Nanami más que nada, pero te entró miedo y huiste. Ni tú mismo lo entendiste, pero cuando amas demasiado, las cosas no salen bien; eso lo sabes...por eso pones excusas y te alejas. Así es cómo protegiste ¿a quién? ¿a ti mismo? no, a tu santuario.

Fragmento de Bokura Ga Ita [Manga].