miércoles, 8 de septiembre de 2010

Helada y con media sonrisa

Hay etapas en las que mi cerebro se congela, queda cubierto por una fina capa de escarcha y permanece en un extraño e inexplicable estado de hibernación. Como única alternativa, continuaré pasiva frente a toda esta controversia, cual caballo con anteojeras.

Que corran las agujas del reloj, que pasen las horas y los días...que el tiempo borre esta presión que me oprime el pecho y me asfixia la mente.

Gracias por esta fotografía de fondo infinito, me gusta muchísimo.

2 comentarios:

  1. Todo se para y sin embargo todo continúa, helados e impasibles ante una realidad donde parecemos no tener lugar. El tiempo es aquel fuerte viento que no deja de soplar, paradójicamente no borra nuestras pisadas y nos acompaña inconscientes en un frío e infinito caminar...

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  2. Peor sería que se te helara el corazón...

    :)

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